Sección Frontones desaparecidos - Renteria

Sin seguir ningun orden lógico iremos presentando en esta nueva sección una serie de frontones  creados para ver jugar a pelotaris profesionales de todos los tiempos y que un dia desaparecieron. Hoy con el paso del tiempo forman parte de nuestra historia olvidada. A ellos les dedicamos este rincón. Esperamos tambien vuestras sugerencias y comentarios.
Para empezar, uno de los pioneros: El Frontón de Renteria.

 CUADRO DE ECHENA.

Hoy que tanto preocupa y á tantos ocupa el sport vasco, como se ha dado en llamar al sencillo juego de pelota, nacido en las humildades de las aldeas y en torno del paredón de la Iglesia, el cuadro del célebre pintor vascongado Echena, hermano del intendente que hoy dirige los destinos del Frontón Barcelones resulta, además de una hermosa obra de arte que los inteligentes podrían apreciar en su justo valor, una página de palpitante actualidad y un cariñoso recuerdo a los "origenes oficiales" del citado Sport. El Frontón de Renteria, el primero ó uno de los primeros erigidos con tal caracter, que puedan considerarse como la cuna del periodismo y Echena, interpretando maravillosamente como en él es costumbre, el ambiente vasco, en el cual vivió y aspiró de niño y los tipos clásicos de los aldeanos de aquellos valles siempre verdes y frondosos, ha hecho célebre aquel tiempo del arte de Irun y Portal. Además, el observador podrá notar en el cuadro, además del vieji indiano que actúa de juez supremo, del perro encargado de recoger las pelotas perdidas y de los corredores que gritan y apuestan, dos detalles importantes representados por dos retratos de dos ilustres personalidades: el Chiquito de Eibar que fué y continúa siendo el Rey de la pelota y el inolvidable Julián Gayarre que en los valles vascos tenía depositado el corazón que echaban en él de menos los que tratandole como amigo, le conocieron solo como tenor.
Echena, laureado por cien obras, tiene un cariño especial a esta y BARCELONA CÓMICA se lisongea de verlo en sus páginas.Extraido de la revista "Barcelona Cómica" publicado el 20 de abril de 1895.

PARTE DE HISTORIA DEL FRONTÓN
DE RENTERÍA

Nunca pensé que sentiría la necesidad de escribir este artículo, sin embargo la noticia de la pronta demolición de nuestro frontón municipal, para la construcción de un mercado y unos multicines, me ha empujado a ello. Este frontón era la única instalación deportiva abierta a todo el mundo con que contaba el pueblo y en él hemos pasado unos ratos estupendos. Por ello, antes de que sea demolido, quisiera apuntar unas notas relacionadas con la historia del mismo que sirvan como pequeño homenaje. El frontón se construyó bajo la dirección de don Segundo Echeverría Lecuona y su inauguración tuvo lugar el día 31 de agosto de 1884. Dicen las crónicas de la época que, “debido al crecimiento e industrialización de Rentería y para mayores ventajas de sus moradores se consideró la necesidad de hacer un nuevo frontón”. Para su construcción fue necesario salir extramuros y edificar sobre terrenos ganados al mar.Al nuevo frontón se le otorgaron las siguientes medidas: 110 metros de largo por 24 de ancho, con frontis y pared izquierda. Dicha pared llegaba hasta el cuadro 10 y medio. El resto del frontón se utilizaba para la modalidad de largo. Quedan todavía frontones de estas características, como el de Zubieta, cerca de Lasarte. El partido de inauguración lo jugaron Indalecio Sarasqueta (“Chiquito de Eibar”) y Vergarés contra Lizurume y Brau (“el menor”). “Tras numerosas igualadas y prolongaciones la victoria se inclinó por los primeros”. El frontón mantuvo esta estructura y las citadas dimensiones hasta comienzos del siglo 20 cuando el gran filántropo de Mondragón, don Pedro de Viteri, donó un grupo escolar a nuestra población. Para la construcción del grupo escolar se utilizaron los terrenos del frontón, concretamente los que se utilizaban para la modalidad de largo, por detrás del cuadro 10 y medio.
El frontón fue acortado y reducido a las dimensiones que ahora tiene.
Este acortamiento del frontón coincidió en el tiempo con la aparición de una nueva modalidad de pelota, llamada yoko-garbi, que comenzaba a mostrar su pujanza y que, si en un pri-mer momento utilizó guante de cuero, prontamente comenzó a utilizar guante de fibra vegetal, llamado “Chistera”. Este nuevo juego que comenzaba a extenderse y que iba a dar los mejores pelotaris surgidos en Rentería no necesitaba las dimensiones de un frontón de largo y las nuevas medidas eran apropiadas para su desarrollo.

José Luis Iturzaeta (año 2002)